10-09-2024, 01:29 PM
¡Hola! Bienvenido al foro y gracias por compartir tu experiencia tan detallada. Me parece que tu análisis es muy acertado, especialmente en cuanto a la relación entre el pH del suelo y la capacidad de absorción de nutrientes por parte de tus tomateras.
Algunos comentarios sobre tus acciones:
Turba rubia: Es un excelente recurso para acidificar el suelo. Al aplicarla y mezclarla, es posible que logres bajar el pH de manera gradual, lo cual es menos agresivo para las plantas. Sin embargo, puede ser necesario agregar más turba en temporadas posteriores si el pH se mantiene alto.
Corrección del agua de riego: El agua alcalina puede ser una causa importante del aumento del pH del suelo. Usar agua ligeramente acidificada (como mencionas, con turba o vinagre) puede ayudar a mantener el equilibrio. Sin embargo, el vinagre puede resultar caro a largo plazo, como señalas. Quizás podrías explorar otras soluciones más económicas como el uso de ácido cítrico, que es comúnmente utilizado para este fin y es menos agresivo.
Quelatos de hierro: Excelente opción, ya que, además de aportar hierro, pueden mejorar la absorción de otros nutrientes como el fósforo y el zinc, especialmente en suelos con pH elevado. Si decides usar quelatos, asegúrate de seguir las recomendaciones del fabricante para evitar una sobrefertilización.
En cuanto a la alcalinización progresiva del suelo, es posible que además del agua de riego, algunos de los abonos orgánicos que utilizas (estiércol) también hayan contribuido a aumentar el pH. El estiércol, dependiendo de su origen y tratamiento, puede tener un efecto alcalinizante si se usa en grandes cantidades.
Finalmente, te recomendaría que sigas monitoreando el pH y hagas los ajustes de manera gradual como lo vienes haciendo. Cambios bruscos pueden estresar más a las plantas. Y en cuanto a experiencias similares, muchos jardineros han reportado buenos resultados con el uso de azufre elemental para bajar el pH de suelos alcalinos de manera más sostenida en el tiempo, aunque los resultados no son inmediatos.
Espero que esta información te sea de utilidad, ¡y mucha suerte con tus tomateras!
Algunos comentarios sobre tus acciones:
Turba rubia: Es un excelente recurso para acidificar el suelo. Al aplicarla y mezclarla, es posible que logres bajar el pH de manera gradual, lo cual es menos agresivo para las plantas. Sin embargo, puede ser necesario agregar más turba en temporadas posteriores si el pH se mantiene alto.
Corrección del agua de riego: El agua alcalina puede ser una causa importante del aumento del pH del suelo. Usar agua ligeramente acidificada (como mencionas, con turba o vinagre) puede ayudar a mantener el equilibrio. Sin embargo, el vinagre puede resultar caro a largo plazo, como señalas. Quizás podrías explorar otras soluciones más económicas como el uso de ácido cítrico, que es comúnmente utilizado para este fin y es menos agresivo.
Quelatos de hierro: Excelente opción, ya que, además de aportar hierro, pueden mejorar la absorción de otros nutrientes como el fósforo y el zinc, especialmente en suelos con pH elevado. Si decides usar quelatos, asegúrate de seguir las recomendaciones del fabricante para evitar una sobrefertilización.
En cuanto a la alcalinización progresiva del suelo, es posible que además del agua de riego, algunos de los abonos orgánicos que utilizas (estiércol) también hayan contribuido a aumentar el pH. El estiércol, dependiendo de su origen y tratamiento, puede tener un efecto alcalinizante si se usa en grandes cantidades.
Finalmente, te recomendaría que sigas monitoreando el pH y hagas los ajustes de manera gradual como lo vienes haciendo. Cambios bruscos pueden estresar más a las plantas. Y en cuanto a experiencias similares, muchos jardineros han reportado buenos resultados con el uso de azufre elemental para bajar el pH de suelos alcalinos de manera más sostenida en el tiempo, aunque los resultados no son inmediatos.
Espero que esta información te sea de utilidad, ¡y mucha suerte con tus tomateras!